En 1999, la jornada de reivindicación del 25-N fue asumida por la Asamblea General de las Naciones Unidas, en la Resolución 54/134, de 17 de diciembre, donde se invita a gobiernos y organizaciones no gubernamentales a convocar actividades dirigidas a sensibilizar a la opinión pública sobre el problema de la violencia contra las mujeres.
Así sigue ocurriendo, desde hace 20 años.