Rafael Martínez, director de nuestro centro, es un hombre activo, aficionado al deporte y responsable. Nació en un pueblo de Burgos y ha vivido gran cantidad de experiencias en sus viajes y trabajos.
La Voz del Elaios- Sabemos que usted es de un pueblo de Burgos, ¿le gustaría volver allí?
Rafael Martínez- Mi mujer y yo somos de un pueblo grande, casi como Huesca y tanto ella como yo hemos estado viajando. Ella estuvo en Bélgica, yo en Palencia, Burgos, Salmanca, Murcia… y nos juntamos en Madrid. Acabamos viviendo aquí, en Zaragoza, cuando a mi mujer le dieron trabajo aquí. Durante un tiempo nos planteamos volver, para tener a la familia cerca, pero mover dos trabajos era difícil. Además, nuestra hija es de aquí y dicen que los padres son de donde los hijos son.
LVE- ¿Del trabajo en Madrid que nos cuenta? ¿Qué tal su experiencia como pizzero?
RM- Trabajé de varias cosas en Madrid: montando cuadros en una galería de arte, como creativo en un periódico, repartiendo pizza, como encargado de una tienda… Cuando me presenté a las oposiciones, después de todas las situaciones que había vivido iba bastante tranquilo, la verdad, porque había vivido y visto varias cosas. Entre ellas atracos, problemas al contar la caja de la tienda… gracias a esto había adquirido experiencia y me ayudó a superar los exámenes. También me enseñó a no pedir nunca en el Telepizza, la organización de un negocio con varios contratos de diferentes horas y diversidad de trabajadores.
LVE- Viaja a menudo al extranjero,¿tiene familia allí?
RM- No, mi mujer estudió en Bélgica, hizo la carrera allí y vamos muchas veces. Además, nos gusta Francia. Ella se encarga de la parte francófona en sus trabajos y eso nos hace estar en contacto con ese país.
LVE- Usted va al instituto en bicicleta y se interesa por el deporte. ¿Qué hace para mantener esa rutina?
RM- Juego al tenis, voy al gimnasio y corro, pero menos que antes. Mi trabajo lleva mucha dedicación, aunque mi reto actual es poder dedicar tiempo a mi familia y al mismo tiempo ser capaz de trabajar bien. El deporte nos permite estar todos juntos, y a día de hoy para mi es más importante que el cine o cómic.
LVE- ¿Cuál fue su primera impresión al acabar la carrera?
RM- Cuando la acabé tenía bastante claro que no iba a ser profesor. Para entonces había sido monitor de natación y de arte en escuelas municipales. Tras un par de años haciendo un posgrado, la crisis me llevó a interesarme po la docencia; empezó a gustarme y nada más sacar las oposiciones en Murcia, me puse a trabajar. Mi primer día no fue sencillo y estaba muerto de miedo. No sabía si organizaba bien las clases, porque lo sepáis o no, cuando una clase entera te está mirando, impresiona. También había cosas en la educación que me gustaban, como cuando te encuentras con alumnos que no son como tú y que no tienes su modelo. Yo pienso en la gente que es como yo, pero hay que explicarlo de manera para que todos lo entiendan. Si eres capaz de motivar y enseñar a gente que no es como tú, entonces es cuando te sientes un profesor. Poco a poco llegué a tener esa sensación y luego ha habido momentos geniales en la educación, pero al principio, sobre todo, miedo.
LVE- Respecto al Elaios, ¿encuentra colaboración con el equipo directivo?
RM- Sí, cuando yo me presento a director, lo hago creyendo que las condiciones son buenas. Es un centro con buena tradición y con las cosas bien organizadas gracias a los directores y equipos directivos anteriores. Algunos de los que forman parte del equipo directivo actual ya tienen experiencia y me aprovecho de ello. Me abrigo de las experiencias y cuando me presenté, todos me aceptaron. En cuanto a los profesores, yo estoy muy contento. Hay mucha gente que tiene ganas de hacer cosas, que quieren trabajar.
LVE- ¿Y con los alumnos?
RM- Voy echando de menos el aula, ya que poco a poco voy conociendo menos a los chicos por las pocas horas de docencia. Por supuesto, si soy director es porque me gusta, pero echo de menos esa relación con vosotros que a veces resulta trabajosa y difícil, pero la esencia de mi trabajo es eso. Mi motivación es intentar establecer un ambiente cómodo y organizado.
LVE- ¿Qué le animó a apuntarse al viaje de Grecia?
RM- Creo que es una actividad muy chula, que organiza Antonio Poves desde hace muchos años y que conviene conocerla de cerca y cuidarla. También voy con la intención de ver cómo se planifica para darle continuidad. Me parece interesante que el viaje de estudios del Elaios no sea Benidorm o a las islas a beber. Antonio habla griego y lleva muchos años haciéndolo y es difícil estar a su altura.
LVE- El primer profesor que supo de su intención de ser director fue Antonio Poves, ¿mantiene una cierta amistad con él o es la relación laboral que se ha formado durante años?
RM- Tú puedes tener un compañero y tener una relación cordial. Con Antonio han sido muchos años juntos en el Departamento y pienso que cuadramos bien. Aunque tenemos opiniones diferentes, respetamos nuestras decisiones y acuerdos.
LVE- Respecto a la política, ¿Qué opinión tiene en cuanto a la ley de Educación que ha causado tanta polémica?
RM- Esa ley está en cuestión y se está revisando por la situación política actual. El problema es que estamos empezando a funcionar sin seguridad ni estabilidad legislativa, ya que cada año es diferente, se tienen condiciones nuevas….
Es un desastre para los alumnos, porque es difícil darles una información que dura dos minutos. Estos cambios constantes creo que no son favorables, pienso que la situación es como un terremoto. Estáis viendo cambios cada dos por tres, buscando el camino para llegar a vuestro objetivo por encima de la ley. Lo que yo opino es que lo que necesitamos es un pacto por la educación.
LVE- Y para finalizar, ¿qué le parece el proyecto del periódico? ¿Cree que alcanzaremos nuestro objetivo o no tiene muchas expectativas?
RM- Tengo muchas expectativas por vosotros, por las profesoras que lo llevan, y porque es un proyecto del centro que está apoyado y que tiene antecedentes de otros periódicos y revistas.
El proyecto es ambicioso ya que mezcla niveles, roles, y los interesados sois vosotros y los profesores. Sois la esencia y aprenderéis con el tiempo.